Si sus hermanos de Citröen y Peugeot me dejaban frío, es más, el primero me daba escalofrío, llega Toyota y nos presenta su propuesta sobre la plataforma que comparte con el grupo francés PSA, a la que pertenecen las anteriores marcas. Hay que reconocer que los japoneses han optado por romper moldes y dotar al coche de un frontal muy agresivo, con esa pronunciada equis que se extiende hasta los retrovisores. Lo amarás, lo odiarás, pero es difícil que pase inadvertido este pequeño urbanita.
Traerá motores tricilíndricos con cajas de cambio manual y automática, ambas de cinco velocidades. En su interior destaca una pantalla de 7" y una distribución sencilla de los elementos. Es un coche práctico, para el día a día, con un toque colorido y, sorprendentemente, algo agresivo.
¿Será esta la nueva línea de Toyota? Hay que reconocer que a diferencia del Auris esta vez si que han sabido terminarle la zaga y que no se quedaron sin ideas.
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