TT Legends - Episodio 2 - Bol d'Or

Desde el pasado miércoles está disponible el segundo capítulo de la serie documental TT Legends. En esta ocasión podremos echar un vistazo a lo que supone una carrera de resistencia en moto, viajando al circuito francés de Magny Cours donde se celebra esta Bol d'Or.

Por si en el primer episodio, que servía de introducción a este mundo de las carreras de resistencia y road races, no había quedado claro, en este segundo se confirma esa máxima de que estos pilotos son simplemente personas normales haciendo cosas extraordinarias.

Pero, como veremos en el vídeo, no sólo son los pilotos los que hacen estas cosas extraordinarias. Sus familias y equipos también llevan a cabo gestas que a cualquier persona de a pie le parecerían al límite de sus posibilidades, si no prácticamente imposibles. Ese equipo de mecánicos capaz de reparar una moto accidentada y dejarla en condiciones de volver a pista en tan sólo quince minutos, amigos y familiares ayudando al chef del equipo a hacer la comida, o ese piloto, Simon Andrews, que apenas recuperado de un accidente que casi le cuesta una pierna decide correr una prueba que sabe que le va a pasar factura.

Y todo ello, sólo por el simple objetivo de llegar a la meta. Gente haciendo lo único que sabe hacer, lo único que les hace sentirse vivos. Esa es la única explicación que uno puede encontrar cuando se enfrenta a estas imágenes, viendo a toda esa gente sacrificando tanto por, en apariencia, tan poco.

Luego tenemos esos breves vistazos, apenas unas pinceladas, pero que dicen mucho de cómo se vive la afición al motor allende los Pirineos, y de las diferencias (por no decir abismo) en cuanto a cultura del motor con respecto a estas tierras nuestras.

Os dejo con el vídeo. Recordad que cada miércoles hay una nueva entrega en el canal de Honda ProRacing.

TT Legends

A principios del pasado año se estrenó en Reino Unido una serie documental que siguió al equipo Honda TT Legends durante la temporada 2012. Durante los ocho episodios que duró, los espectadores británicos pudieron echar un vistazo a todo lo que hay detrás de uno de los campeonatos más duros del mundo del motor, el Endurance World Championship, compuesto de cuatro pruebas: Bol d'Or, 8 horas de Suzuka, 8 horas de Oschersleben y las 24 horas de Le Mans; así como a las que son casi sin duda las dos road races más famosas, la North West 200 y el TT de la Isla de Man.

Ahora, un año después, la productora Gaucho Productions ha puesto esta serie a disposición de todo el mundo a través del canal de Youtube de Honda ProRacing. Desde este pasado 15 de enero está disponible el primer capítulo, e irán subiendo los siguientes a razón de uno a la semana.

Es sin duda una oportunidad única para dar un vistrazo un poco más allá de lo que estamos acostumbrados a ver los fines de semana por televisión. El contraste, en especial para los que nunca hayan visto una road race, puede ser abrumador sobre todo si se compara con los circos mediáticos de campeonatos más "importantes" o que mueven más dinero. Aquí vemos a fontaneros, mecánicos de camiones o recolectores de mejillones jugándose el pellejo a cada curva, a cada frenada, sólo porque, en sus propias palabras, no pueden dejar de hacerlo.

Este primer capítulo es una introducción somera a lo que será el resto de la serie, pero aún así tiene apuntes muy interesantes, y ya en los primeros minutos podemos ver que los pilotos del TT están hechos de una pasta muy diferente, al igual que sus parejas, o su equipo técnico.

La única pega es que está sin subtitular, y los subtítulos automáticos de youtube dejan bastante que desear, aunque bastante hacen lidiando con los diferentes acentos de los protagonistas. Aquí os dejo el primer episodio:

Fuente: Honda ProRacing

Carretera al horizonte, carretera sin fin.

Carreteras, caminos, senderos, vías, autopistas, travesías... Todas tan diferentes y sin embargo todas tienen algo en común: en la teoría, su cometido es unir el punto A al punto B y facilitar el traslado de vehículos, personas y mercancías entre ellos. Y también tienen en común que a mí, personalmente, pocas veces me importa de dónde a dónde me lleven, porque lo importante, lo interesante de verdad, es lo que ocurre en medio.

Aún no he encontrado una carretera que no me ofreciera algo, desde la autovía más recta y aburrida (aún me acuerdo de ciertos tramos de la A-4), hasta el camino de cabras más impracticable y perdido de la mano de dios. En todos ellos he encontrado algo que disfrutar, ya fuera el paisaje, el clima, la compañía o las sensaciones del vehículo en el que me encontrase en ese momento.

Cuando se me propuso escribir en este blog enseguida empecé a darle vueltas, como suelo hacer con todo. No soy un profesional de ésto (ninguno lo somos), nunca he escrito nada "serio", no soy periodista, no, no, no, no... Eran demasiados noes, y por tanto esa línea de razonamiento no tenía ningún sentido, así que la descarté por completo.

Entonces empecé de nuevo. Me gustan los coches, las motos, las competiciones de motor (rallies, F1, MotoGP, Superbikes, TT...) y disfruto como un enano cuando se da esa situación perfecta con la que todos soñamos alguna vez: una carretera vacía, el sol bien alto en el cielo y buena música en el equipo, y todo lo demás es un extra bienvenido. Pienso que son razones que justifican de sobra que me siente de vez en cuando a darle a la tecla.

Porque para leer reviews estériles sobre el último modelo en el mercado, u opiniones incendiarias sobre tal o cual competición, o exclusivas que se acercan más a la prensa rosa que al mundo del motor, ya tenemos miles de medios dedicándose a ello. Nosotros esperamos poder contar las cosas de forma un poco diferente, un poco más a pie de calle, más subjetiva. Siendo como es algo que hacemos porque queremos, también queremos hacerlo como queremos.

Y yo, personalemente, quiero hablar de sensaciones, de emociones, de ese algo que tiene el motor que a todos nos llama, pero ninguno sabemos explicar. Por qué se nos acelera el pulso al oír ese V8 acelerar hasta lo rojo, o ese chirrido de neumáticos es como música celestial, o cómo el culeo al salir de la curva resulta más excitante que bailar un tango bien agarrado.

Espero encontrar esos momentos perfectos, para venir aquí a contarlos. Ocasiones no van a faltar, si hay algo que hoy tenemos de sobra son carreteras. O carretera, porque todas están conectadas y acaban siendo la misma, y como escribía Kerouac "en definitiva, la carretera tiene que dar la vuelta al mundo". Así, el horizonte no es más que una ilusión, una excusa para seguir adelante, un destino al que nunca llegar y poder seguir disfrutando del viaje.